
¿Qué tan aburrido es tu plan de capacitación?
Muchas áreas y equipos de trabajo requieren aprender cosas nuevas para su propio crecimiento y el de la empresa, y es ahí cuando llega el momento incómodo y al que muchos le huyen: la capacitación.
¿Pero por qué las capacitaciones se evitan a toda costa y tienen tan mala fama? Por una simple respuesta: son aburridas.
Ya sean presenciales o digitales, estos programas no cumplen con su objetivo y los colaboradores terminan por abandonarlos o terminarlos por mera obligación.
Y es que se desafortunadamente se cae en error, en el autoengaño, de pensar que una sesiones de aprendizaje con un fondo de colores y un par de imágenes atractivas, va a resolver las necesidades y áreas de oportunidad de los colaboradores.
Pero no se detiene a pensar en escenario y las condiciones adecuadas para que los planes de capacitación se conviertan en espacios de interacción, atracción y sobre todo, aprendizaje.
Por esa razón, te compartimos un medidor de aburrimiento para que logres identificar cómo se encuentran tus capacitaciones y cómo puedes mejorarlas.
Este medidor fue desarrollado por Janet Clarey, investigadora en Recursos Humanos y mide el aburrimiento en 5 niveles. Toma nota.
Nivel 1: Grave riesgo de aburrimiento
El entorno de la capacitación está saturado de textos, conceptos y teoría. Utiliza lenguaje muy técnico y no es conciso, como quien dice, “no va directo al grano”, a la necesidad particular de quien lo toma.
Carece de espacios para el diálogo y la retroalimentación, por lo que es muy pesado y resulta poco atractivo para los usuarios.
Nivel 2: Alto riesgo de aburrimiento
Busca ser un poco más interactivo que el anterior, pero se cae en el típico error de diseñar cursos estilo “click next”.
El contenido sigue siendo pesado y su nivel de participación se reduce a que el usuario haga clic una y otra vez para pasar a la siguiente diapositiva. Esto lo hace tedioso y repetitivo.
Nivel 3: Riesgo importante de aburrimiento
El uso de texto es menor y se contemplan imágenes u otros medios audiovisuales.
Ya se observan más claramente los objetivos de aprendizaje desde el inicio del curso, sin embargo, los contenidos se siguen presentando de manera lineal, sin un storytelling con el que el usuario se identifique.
Plantea evaluaciones al final del curso que se reducen a preguntas de opción múltiple, pero en realidad, es una presentación disfrazada de gráficos, audio y video que solo distraen al usuario del contenido.
Nivel 4: Riesgo moderado de aburrimiento
Los contenidos, recursos y medios audiovisuales se incorporan con mayor detenimiento, pero aún son elegidos arbitrariamente y en el afán de querer despertar la interacción, llegan a ser tediosos después de un rato, pues no responden a una necesidad auténtica por parte del usuario.
Nivel 5: Bajo riesgo de aburrimiento
Este es el escenario ideal, porque se trata de cursos divertidos, que conocen qué le motiva al usuario para así desafiarlo a lo largo de su recorrido y al mismo tiempo, brindarle información concisa, pero sobre todo, relevante para su día a día.
Los elementos multimedia están pensados en función de los deseos, necesidades y objetivos del usuario, y aparecen en función de la narración o el entorno que busca propiciarse.
El texto se emplea a modo de conversación, se lee de forma amena pues contiene storytelling y cada frase despierta la curiosidad del espectador, le hace una llamada a la acción.
¿En qué nivel de aburrimiento se encuentran tus capacitaciones?
En Gameif® podemos ayudarte a reforzar y motivar el aprendizaje de tus colaboradores de forma dinámica y divertida.
