
La capacitación con enfoque de género
El pasado 8 de marzo fue el Día Internacional de la Mujer, fecha para conmemorar la lucha de las mujeres por sus derechos e igualdad de oportunidades, y por construir un entorno equitativo, sin estigmas, estereotipos ni violencia.
No se puede vislumbrar un futuro mejor para las mujeres si no hay una integración más equitativa en el ámbito económico y laboral, ya que, la independencia económica es clave para la existencia de la libertad afectiva y el pleno gozo de derechos.
Un camino por recorrer
Respecto a este tema, en México aún falta mucho por hacer.
Históricamente a la mujer se le han asignado determinadas tareas por su género, como son las labores domésticas y el cuidado de los niños, actividades que además de no ser remuneradas exigen gran parte de su tiempo.
Lo anterior ha llegado a frenar su desarrollo en el ámbito educativo y/o profesional. Consecuencia de ello, actualmente la brecha salarial es del 18%, además de que la tasa de participación económica es 27% mayor en los hombres.
Otro de los obstáculos que impiden su desarrollo profesional está relacionado al entorno violento que hay en algunos trabajos.
De acuerdo a datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), 1 de cada 4 mujeres ha sido víctima de violencia laboral, especialmente de tipo sexual o discriminatorio.
Capacitación corporativa para la igualdad
Para solucionar ambas problemáticas es importante que, tanto los gobiernos como las empresas privadas, impulsen programas de capacitación laboral y empresarial con enfoque de género.
A través de estos, se deberán de visualizar dos objetivos:
El primero, enfocado a eliminar la desventaja profesional en la que se encuentran actualmente la gran mayoría de las mujeres, brindándoles las herramientas necesarias para ampliar su visión en aspectos profesionales y personales, y desarrollar nuevas capacidades y habilidades, de tal forma que estén al día en cuanto a la competencia laboral.
El segundo se basa en crear e impulsar ambientes de trabajo respetuosos, en el que se penalicen las conductas violentas e inadecuadas y se trabaje en conjunto para construir una cultura laboral más equitativa.
Aquellos proyectos que empoderan a la mujer a través de iniciativas de capacitación, han demostrado ser clave para resolver problemas sociales, luchar contra la desigualdad y mejorar las condiciones económicas y sociales de los países.
Un futuro prometedor
Ellias Micha, Director General de TallentiaMX, menciona que las proyecciones elaboradas por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) indican que, si en los próximos 10 años, nuestro país incorpora a 8.2 millones de mujeres al mercado laboral formal, igualaríamos la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Asimismo, alcanzaríamos un asombroso crecimiento de 15% del Producto Interno Bruto (PIB).
En síntesis: integrar a más mujeres a la economía beneficia a las mujeres y a la economía. Tenemos que trabajar de manera urgente en esa dirección.”
En definitiva invertir en programas de capacitación con enfoque de género es fundamental no solo para impulsar la equidad de género, sino también para mejorar las condiciones de vida de muchas mujeres y de la sociedad en general.