
OnBoarding: Dale la bienvenida a nuevos elementos.
Recuerda cómo llegaste a la empresa donde actualmente laboras. ¿Cómo fue el proceso de adaptación y aprendizaje?
Muchas ocasiones, aunque hagamos pruebas durante el proceso de reclutamiento, e incluso nos hayamos sometido a un plan de capacitación para el puesto al que postulamos, cuando llega el día de instalarnos y poner manos a la obra, no sabemos por dónde empezar. ¿Te ha pasado?
Hasta hace poco, incorporarse a un puesto de trabajo implicaba saltar al vacío e ir entendiendo -como fuera- los procesos internos de la empresa. Esto ocasionaba que los trabajadores se sintieran abandonados y desmotivados, para al poco tiempo renunciar o ser despedidos por su bajo desempeño.
A su vez, las empresas perdían tiempo y dinero que habían invertido en la búsqueda de talento, periodo de prueba y adaptación de sus empleados.
La manera de gestionar una incorporación a la empresa puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso en una nueva contratación.
-Gerardo Kanahuati
En este contexto, nace el término OnBoarding, una estrategia diseñada para ayudar a los colaboradores a realizar armoniosamente la transición hacia su nueva etapa profesional y de esta forma, tomar consciencia de su rol desde el primer día de trabajo.
Con el OnBoarding, se optimizan los procesos y recursos empresariales, así como el tiempo promedio en alcanzar objetivos. Las corporaciones han podido comprobar el beneficio que tiene inducir a sus empleados, para disminuir la tasa de errores y rotación de personal.
A diferencia de los programas de inducción tradicionales, se trata de un proceso de integración donde el nuevo elemento, se mantiene en constante interacción con todas las áreas de la empresa, esto incluye sesiones de formación e interacción social con sus compañeros, jefes directos y staff directivo.
Este método se enfoca en:
- El conocimiento profundo de la empresa y todo lo que le rodee.
- La cultura empresarial y la forma de operar en el mercado.
- Los procedimientos de negocio, asociados al puesto y las herramientas que se utilizarán.
Dichos ejes permiten que el personal se sienta motivado, entienda sus funciones, conozca la compañía y sobre todo, se incorpore a la cultura y visión de la empresa, involucrándose para alcanzar más rápidamente los objetivos.
Disminuyendo la curva de aprendizaje.
Existen muchas formas de aplicar OnBoarding, una de ellas es a través de la gamificación, que mediante el juego, brinda contenido atractivo y novedoso para que los nuevos colaboradores se sientan identificados con su organización.
Comúnmente los trabajadores participativos o con experiencia, buscan nuevos retos y oportunidades de desarrollo profesional en los primeros 12 meses. Los recursos de capacitación gamificados, aumentan la retención del conocimiento y participación, poniendo a prueba sus habilidades y know-how.
La gamificación aplicada al OnBoarding, permite a los empleados completar tareas de aprendizaje e iniciación de forma lúdica, mejorando su experiencia y reduciendo el tiempo invertido en los programas de capacitación de personal.
Un estudio realizado por Autodesk Research Toronto, comprobó que gamificar reduce aproximadamente 2.5 veces el tiempo invertido en el aprendizaje, frente a la metodología tradicional.
Asimismo, invita a la repetición de áreas de aprendizaje. Con la gamificación las tareas se repetían en un promedio de 7.8 veces, mientras que con los métodos antiguos sólo 1.1 veces.
Esta información es muy valiosa porque la repetición es un mecanismo eficaz para consolidar el conocimiento, pero ésta sólo se da si las mecánicas y dinámicas dentro de un sistema, motivan la proactividad de los colaboradores.
La gamificación, permite mejorar la experiencia de los usuarios, incitándolos a perseguir sus propias metas. Pero, ¿cómo?
Atraídos por la novedad.
Los elementos del juego, tales como las competencias, dinámicas, feeedback, narrativa y recompensas, automatizan un elemento clave dentro del progreso de un colaborador: el reconocimiento.
En la inducción tradicional, no existe forma de diferenciar entre un trabajo de 5 y uno de 10, pues reconocer el desempeño de forma individual es muy complejo y tardado. En cambio, gracias a componentes como tableros de ranking o clasificación y el desbloqueo de niveles de progreso, los usuarios pueden ver reflejado su esfuerzo y las empresas pueden visualizar las aptitudes y áreas de oportunidad de cada usuario.
Un ejemplo de ello es GameIf®, una app que a través de juegos de trivia, permite a los colaboradores actualizarse sobre sus respectivas áreas de trabajo.
Con un contenido formativo en un espacio dinámico como el juego, los colaboradores aumentan la retención del conocimiento, a través de competencias, retos y recompensas (medallas e insignias), que los hace involucrarse con el aprendizaje.
Además, permite visualizar en tableros, los niveles de puntuación de los empleados y equipos de trabajo.
Por medio de una interacción constante y multidireccional, el empleado identifica los mecanismos de trabajo, al mismo tiempo que adquiere diversas competencias.

¿Cómo gamificar el OnBoarding?
Tenemos excelentes noticias: la gamificación no tiene límites.
Y es que ésta dependerá de los objetivos que una empresa persiga. Pueden implementarse quizzes, tutoriales y diversos casos prácticos, que simulen situaciones reales, y permitan a los colaboradores formarse e integrarse eficazmente a su nuevo puesto de trabajo.
El conocimiento de los nuevos colaboradores, sus dotes de comunicación, manejo o solución de problemas, sistema de valores y escala de prioridades, son algunos de los factores que pueden visualizarse gracias a la gamificación aplicada al OnBoarding.
Como has podido ver, la formación oportuna, con contenido relevante y novedoso, prepara a los empleados a alcanzar metas individuales y cumplir con las expectativas de la compañía. Mientras más rápido se comprenda la cultura y funcionamiento de una organización, los nuevos colaboradores se involucrarán y rendirán más.