Integrar nuevas generaciones a nuestro equipo de trabajo es una necesidad corporativa bastante positiva para el desarrollo y la aplicación de estrategias que nos beneficien y ayuden a alcanzar nuestros objetivos. Sin embargo, la adquisición de nuevo talento involucra un diferente rango de edad y, por ende, toda una serie de comportamientos y pensamientos distintos que nos pone difícil lograr su retención.

Hace un par de años, la fuerza de trabajo millennial representó un arduo y duro trabajo en la búsqueda de adaptar modelos de trabajo a las necesidades (y muchas veces comodidades) de esta generación. Pues, el objetivo principal del ejercicio de retención consiste en aprovechar el potencial del nuevo talento con el mínimo de pérdidas en capacitación y contratación.

Si el portafolios se transformó en una laptop, la corbata en un smartphone y la lonchera en un starbucks. ¿Qué nos espera en unos años?

El nuevo impulso laboral actual busca un ambiente cómodo para trabajar, fuera de estatutos y reglas convencionales. Pero también posee otras formas de pensamiento y actitudes de los cuales podremos obtener grandes resultados. ¿Cómo tú puedes lograrlo?

Los cohortes generacionales y el desempeño de nuestro equipo

El cohorte generacional es aquella brecha de experiencias formativas (político, social, económico y tecnológico, principalmente) que existe entre las personas con base en la época en que nacieron. Es de allí que surge la clasificación entre la generación X, millennials (generación Y) y centennials (generación Z).

Esta diferencia de edades involucra una visión distinta de las cosas que se ve reflejado, entre muchas otras cosas, en nuestras actitudes laborales. Sabiendo esto, podremos orientar nuestros esfuerzos de trabajo con base en sus necesidades y motivaciones laborales.

¿Por qué adaptarnos a las nuevas generaciones?

No se trata de pertenecer a un culto que opta por la innovación e ignora formas tradicionales de trabajo, como muchas empresas piensan. Colaborar con nuevas generaciones involucra también generar nuevos enfoques que cubren demandas y expectativas empresariales. Al igual que su retención contribuye a evitar gastos mayores en entrevistas, capacitación, rotación de empleados y resultados poco gratificantes.

La nueva fuerza laboral y del que ya se empezó a hablar es la famosa generación Z o centennial. Su edad mínima actual ronda los 22 años de edad y han comenzado a ejercer en el mercado laboral. Para no quedarte atrás, estas son algunas características de esta generación que debes conocer:

1. Son nativos digitales. Los dispositivos móviles y la conexión a internet han formado parte de su vida desde que tienen memoria. Por ello, conocer y utilizar recursos electrónicos y conocer los usos de la web no será difícil.
2. Les gusta la accesibilidad. A diferencia de la generación anterior (millennial), las demandas laborales de los centennials son más alcanzables. Existe un mayor compromiso con su labor y están dispuestos a retribuir su experiencia y conocimientos.
3. Son entregados a su labor. Ellos buscan que su trabajo importe. Les agrada saber que su trabajo alcanza un impacto positivo para el mundo.
4. No les gustan los roles. Los centennials no están satisfechos con sus roles de trabajo. Parte de su desarrollo profesional también está en buscar establecer buenas relaciones con sus compañeros y superiores, puesto que destacan más en considerarse parte de que empleado de.
5. No son adictos a la tecnología. Pareciera increíble pero cierto. A pesar de la inmersión que tiene esta generación en la cultura digital, los centennials valoran la interacción humana lo suficiente para no estar tan apegados a internet.

Conocer las actitudes y formas de pensamiento de nuevas generaciones te ayudará a aprovechar sus motivadores y contribuir a que destaquen en su desempeño para alcanzar nuestras metas. ¿Tú cómo integras estas nuevas generaciones a tu equipo de trabajo?